Gastronomía en Milán - Italia
La comida italiana se caracteriza por unos colores y aromas muy intensos, los cuales la convierten en una de las principales figuras de la cocina mediterránea. Si visitas este país te auguramos un gran disfrute en lo que al placer del apetito atañe, pues ya te adelanto, que las populares pizza y pasta no son los únicos protagonistas del arte culinario en Milán.
Antes de entrar de lleno en los típicos platos, tenemos que contarte algunas curiosidades:
1.- En Milán, al precio del plato se le añade el precio del cubierto, es decir, un precio fijo por comensal, invariablemente de lo que vaya a comer cada uno. Cuando hay niños se suele cobrar medio cubierto por ellos, dado que suelen consumir menos, pero esto depende del lugar. En general el precio del cubierto puede variar entre 1,5 y 6€ por persona (depende de la categoría del local). En los pocos lugares donde no se cobra este plus, suele indicarse en la puerta de entrada y en el propio menú de esta forma: "No Cover Charge".
2.- Es importante que tengas en cuenta que la bebida en algunos lugares es bastante cara, por lo que antes de pedir nada te recomendamos que preguntes el precio. En algunos sitios una cerveza puede costar lo mismo que un plato de carne. Mira el precio de 2 copas de vino:
3.- Es muy difícil tomarse una cerveza a media mañana o antes de comer, vamos, es casi imposible, no hay bares como los nuestros de tapas, ni pubs como los ingleses donde tomarte una pinta a cualquier hora... Nunca nos había pasado algo así en ninguno de nuestros viajes. Finalmente encontramos un kiosco en los alrededores del castillo y... allí fue.
4.- Allí lo que se lleva es el típico aperitivo milánes. En Milán las cenas son largas; la gente suele reunirse temprano y terminar la reunión muy tarde. Dichos encuentros consisten en un aperitivo, donde se toma margarita o alguna bebida similar, acompañada con jamón, mortadela, salame, aceitunas, quesos, carpaccio, entre otras cosas. Verás que en Milán hay muchos locales que ofrecen este aperitivo tipo buffet. Después del aperitivo, se pasa a la comida propiamente dicha, donde se suele tomar vino, y, finalmente, el postre y el café.
5.- El Panettone. No puedes dejar de probar su especialidad, el panettone, que generalmente se sirve en Navidad pero los habitantes de Milán llegan a consumirlo como postre o desayuno. Consiste en un bollo con forma de cúpula relleno de cidro confitado y pasas.
Platos típicos Milaneses:
- Ensalada caprese: Ensalada de tomate con queso mozzarella.
- Carpaccio: Carne o pescado crudo en láminas finas. Se sirve con un aliño de aceite y limón.
- Frutti di mare: Marisco.
- Arancini: Croquetas de pasta y arroz.
- Vitello tonnato: Ternera acompañada de salsa de yemas de huevo cocido, atún y crema de leche.
- Bresaola: Embutido de ternera.
- Prosciutto: Jamón. El prosciutto crudo es como el jamón serrano y el cotto es jamón york.
- Gnocchi: Pasta realizada a base de patata.
- Risotto: Arroz con un poquito de caldo.
- Calamari: Calamares fritos.
- Cotoletta alla milanese: Escalope.
- Ossobuco alla milanese: Guiso de jarrete de ternera.
- Panini de los que se venden en la mayoría de los restaurantes. Suelen costar sobre 4€ y se sirven calientes.
Vitello tonnato |
- Panettone: bollo con forma de cúpula relleno de cidro confitado y pasas originariamente, en los últimos años lo rellenas de chocolate u otros.
- Zabaione: Crema hecha a base de yema de huevo, azúcar y vino dulce.
- Panna cotta: Crema de leche y azúcar con textura gelatinosa cubierta con sirope o mermelada.
- Tiramisú: El postre italiano más internacional. Lleva bizcochos, café, cacao y otros ingredientes.
- Babà: Bizcocho cubierto de licor.
- Amaretti: Galletas de almendra.
Babá al rum con gelatto |
- Limoncello: Licor de limón.
- Amaretto: Licor de almendras.
- Sambuca: Licor fuerte y anisado.
- Campari: Bebida roja de sabor amargo.
Sambuca |
- Caffè corretto: Café con un chorrito de licor. Es similar al “carajillo”.
- Caffè macchiato: Café cortado.
- Latte macchiato: Café con leche poco cargado.
- Helados italianos
Los lugares más recomendables para comer en Milán, son las terrazas de la vía Dante, ubicada frente al Castillo Sforzesco, o bien por los alrededores de la Plaza del Duomo.
Junto al Duomo y la Galería Vittorio Emanuele II se encuentra Luini (Vía Santa Radegonda, 16), uno de los lugares más frecuentados por los milaneses. Sus panzerotti, empanadas rellenas de tomate y mozarella, son los más famosos de la ciudad.
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